19 diciembre 2007

Reflexion.

Conserva tu Tenedor


Una mujer que había sido diagnosticada con una enfermedad incurable y a la que le habían dado sólo 3 meses de vida; decidió empezar a poner sus cosas "en orden".

Visitó a su sacerdote para decirle su última voluntad; las canciones que quería que se cantaran en su misa de cuerpo presente; las lecturas bíblicas y con qué traje deseaba ser enterrada. "Hay algo más", dijo ella exaltada.

"¿Qué es?" respondió el sacerdote. "Esto es muy importante", continuó la mujer. "Quiero ser enterrada con un tenedor en mi mano derecha."

"Eso lo sorprende, ¿o no?" preguntó la mujer. "Bueno, para ser honesto, estoy intrigado con la solicitud", dijo el sacerdote.

La mujer explicó: "Siempre que he asistido a eventos sociales recuerdo que cuando se retiraban los platos, alguien decía: 'Quédate con tu tenedor'.

Y sabe porque padre porque venía lo mejor ¡El postre!... como pastel de chocolate o torta de manzana. Así que quiero que la gente me vea dentro de mi ataúd con un tenedor en mi mano y quiero que se pregunten ¿Por qué el tenedor? Después quiero que usted les diga: 'Se quedó con su tenedor porque lo mejor está por venir"

Los ojos del sacerdote se llenaron de lágrimas de alegría. Él sabía que ésta sería una de las últimas veces que la vería antes de su muerte. Pero también sabía que la mujer tenía un mejor concepto del Cielo que él mismo. Ella sabía que algo mejor estaba por venir.



Recopilacion: henryolito

1 comentario:

Edgar López dijo...

Que bueno que existan personas como tu, que realcen nuestras raices sigue adelante y echale una mano a nuestro Rabinal